De lado, de frente y hasta por atrás

Por Txema Campillo, el 14 octubre, 2011. Categoría(s): Biología • Curiosidades

Esa vaca de la imagen, a esa distancia, no te está viendo. Tal vez te vea la parte de atrás de la cabeza pero no mucho más. Si te alejas unos pasos ya te verá completo pero no creo que en tres dimensiones. Los herbívoros sacrifican agudeza visual por un campo visual muy amplio que, por ejemplo, en el caso de una vaca puede llegar a los 300º.

Teniendo en cuenta que si eres una vaca tu comida no se mueve, un campo visual amplio hace que tengas más posibilidades de huir si aparece un predador, así que es obvio el porqué la evolución ha premiado a los que nacían con los ojos a los lados. Un predador, en cambio, necesita calcular muy bien la distancia a la que tiene que atacar, así que los ojos los tienen en posición frontal obteniendo una mayor área confocal y poder ver en tres dimensiones para así tener percepción de profundidad.

¿Y nosotros, los primates, por qué los tenemos en posición frontal si somos omnívoros? ¿La evolución no debería habernos dotado de ojos laterales para evitar ataques? Pues la respuesta más aceptada en la hipótesis arbórea es que los primates usaban su visión en 3D para calcular la distancia que separaba las ramas de los árboles.

Credito imagen:

En las islas Baleares existía un herbívoro, el Myotragus balearicus, que no tenía predadores a los que hacer frente y aunque en principio llegó con visión lateralizada la evolución lo fue llevando hacia la visión frontal, que le daba una mayor precisión a sus saltos y escaladas. Es el único caso conocido de herbívoro con visión frontal y fue extinguido en cuanto llegaron predadores a las islas, es decir, los seres humanos.



Por Txema Campillo, publicado el 14 octubre, 2011
Categoría(s): Biología • Curiosidades