Científicos estadounidenses creen que un microbio que se alimenta de monóxido de carbono podría ayudar a producir combustible económico a partir de los humos del tubo de escape que expulsan los coches.
El microbio Azotobacter vinelandii, que se encuentra en el suelo en las raíces de varias plantas, crea una enzima llamada anadio nitrogenasa, que normalmente produce amoniaco a partir del nitrógeno. Pero ahora se ha descubierto que también produce propano a partir del monóxido de carbono, un subproducto común en varios procesos industriales.
En opinión de Markus Ribbe, científico de la Universidad de California en Irvine, en última instancia esta encima podría «trucarse» para que en lugar de crear moléculas simples de propano, pudiera crear moléculas más complejas como la de la gasolina.
Los científicos creen que el monóxido de carbono producido en los tubos de escape de los coches a causa de la combustión incompleta, podría servir en el futuro para que los vehículos obtuvieran parte de su combustible mediante el procesamiento de sus propios humos.
Aunque para llegar a eso falta un largo camino, como dice Ribbe, ya que extraer, cultivar y almacenar cantidades suficientes de anadio nitrogenasa es algo «muy, muy difícil».
Resumido de un artículo del Telegraph.
Crédito imagen Earth System Science Center.
Miguel A. Artime Menéndez (Avilés 1971). Estudió informática en la Universidad de Oviedo. En 2002 comienza a publicar traducciones en el germen de lo que luego sería Astroseti, web que con el tiempo se convertiría en la web astronómica más visitada en lengua hispana. En Astroseti coordina la sección del Instituto de Astrobiología de la NASA (NAI). En 2005 la agencia espacial estadounidense le invita (junto al creador de la web Emilio González) a San Francisco para la conferencia AbSciCon. Comienza su experiencia con los blogs abriendo una bitácora en Barrapunto en 2005. En noviembre de 2006 funda su blog Maikelnai’s Blog. En 2009 recibe en Sevilla el premio Bitácoras al mejor blog cultural. En junio de 2010 comienza a colaborar con Yahoo! abriendo el blog Cuadernos de Ciencia junto a Javier Peláez.