¡La ISS se ha «tragado» mis calcetines!

Por aberron, el 6 septiembre, 2010. Categoría(s): Astronomía • Curiosidades
El astronauta Edward M.Fincke en la ISS
El astronauta Edward M.Fincke en la ISS

Según el testimonio de los astronautas, se diría que las naves en órbita se tragan los objetos de la misma forma misteriosa en que las lavadoras hacen desaparecer los calcetines. Cada vez que viajan a bordo de la Estación Espacial Internacional o alguno de los trasbordadores, sus tripulantes pierden herramientas y todo tipo de objetos personales que vuelven a aparecer al cabo de meses en los lugares más insospechados o simplemente siguen desaparecidos.

Lo explica el veterano astronauta Tom Jones, quien relata en Air&Space Magazine cómo él mismo ha perdido la cuchara en varias misiones y luego la ha encontrado, envuelta en una bola de pelos y M&Ms aplastados, en el filtro de aire. “No importa lo bien que cierres tus bolsillos de velcro”, asegura, “algunas piezas vitales del equipamiento desaparecerán ¿Volverás a verlas? Es una incógnita”.

Algunos astronautas, como Don Pettit, atribuyen estas pérdidas al hábito terrestre de mirar hacia abajo cuando se nos cae un objeto. Allí arriba, en condiciones de microgravedad, el objeto que sale de un bolsillo puede tomar cualquier dirección y esconderse en el lugar más intrincado de la nave. En la ISS, por ejemplo, no es raro perder una llave y encontrarla días después pegada al techo de otro compartimento, a pesar de haber pasado horas buscándola por todas partes.

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=JgBgmw-2U8c[/youtube]Un paseo por la estación Espacial Internacional (NasaTelevision)

Entre las anécdotas que relata Jones, destaca el plátano perdido en el Spacelab en 1985 (aparecería después pegado en una de las paredes de la cabina), el cosmonauta que extravió la maquinilla de afeitar en la estación MIR  o el caso de Sonny Carter, que perdió el reloj de pulsera en el Discovery y permaneció perdido hasta que un astronauta de la siguiente misión retiró unos paneles y lo encontró junto un paquete de sales y un cepillo para el pelo.

La palma se la lleva la ISS donde en cada misión desaparecen cultivos, herramientas y hasta se descontrola alguna araña de los experimentos. La cosa es tan seria que los astronautas han buscado una solución provisional y cuentan con una bolsa de “objetos perdidos” donde van depositando las piezas que aparecen aquí y allá y no saben de quién son o a qué parte de la estación pertenece. De vez en cuando fotografían sus contenidos para ver si los ingenieros de tierra identifican las piezas y valoran si son importantes.

Según el artículo de Jones, de los 22.000 artículos cargados alguna vez en la ISS, los controladores consideran que 638 están descolocados o perdidos dentro de la propia estación.

Por eso, como bromea Tom Jones, el día que jubilen la ISS, el tipo que recoja la calderilla de los paneles del suelo seguro que reúne una pequeña fortuna.

Enlace: Lost In Space, Tom Jones (Air&Space Magazine)