Corre, corre, bisonte

Por maikelnai, el 2 noviembre, 2010. Categoría(s): Fotografía


Esta imagen, tomada en abril de este año por el funcionario Duke Wypyszinski, trabajador del Servicio de Parques Nacionales de los Estados Unidos ha dado la vuelta al mundo. Su autor la tituló «Bad start to a bad day» (un mal comienzo de un mal día) y con ella ha logrado el primer premio fotográfico Ycerp en categoría vida salvaje.

En principio se dudó sobre la autenticidad de la imagen, pero fuentes oficiales del Parque Nacional de Yellowstone (organizadores del concurso) aseguran que no hay trucajes digitales. La imagen se tomó concretamente entre Madison Junction y el archiconocido geyser Old Faithful, en una área llana del gran parque de Wyoming conocida como Fountain Flats.

Y hablando de geysers. Esas feas heridas que le véis al bisonte no se las ha producido el oso, el desventurado bóvido ha tenido la mala suerte de ser desollado por las aguas hirvientes de uno de estos sifones geotermales.

¿Qué fue lo que le sucedió al desesperado bisonte instantes después de que se tomara esta foto? Pues me temo que no hay forma de saber si el bóvido acabó convertido en las «viandas» (como diría Yogui) del plantígrado.

Lo que si sabemos de los osos Grizzlies es que a pesar de llegar a alcanzar pesos de hasta 400 kilos, en distancias cortas alcanzan velocidades cercanas a los 50 kilómetros por hora (prácticamente igual de veloz que un caballo). Afortunadamente no destacan por su fondo, así que a lo mejor el bisonte no tuvo un mal día después de todo.

Me enteré leyendo Ecopolitology.

Actualización: Podéis ver el resto de la secuencia aquí. Vía: @kurioso. En el enlace relatan que el bisonte logró escapar entre los árboles para vivir un día más. Los guardabosques tuvieron que abatirlo al día siguiente dada la gravedad de sus heridas.