Ya lo comentaba el Amazing Paco Bellido, el polvo lunar es un asco. No solo se pega al traje, resulta abrasivo y huele raro; además si se cuela en el habitáculo de los astronautas, puede provocar fallos en los equipos y serios problemas de salud.
Y claro, no es plan. Así que los aguerridos ingenieros de la NASA buscan una solución al problema, y se les ha ocurrido algo como lo que veis en la foto. Una especie de mascarón de proa formado por un par de trajes encastrados en el casco del vehículo, que no hace falta introducir al recinto del vehículo explorador.
Cuando los astronautas quieren dar un paseo lunar, abren una trampilla en la espalda del traje, se cuelan dentro, y salen a pasear por la luna. Luego, cuando quieren regresar, se pegan de espaldas al puerto para trajes, abren la trampilla de la espalda (alineada con la escotilla) y vuelven al interior libres de polvo. De este modo, la entrada y salida de los habitáculos se hace mucho más cómoda, ya que se evitan las tradicionales esclusas de aire a las que hay que practicar despresurización, con la consiguiente pérdida del precioso aire que siempre se produce.
Una gran idea que al parecer la NASA prueba ya con prototipos.
Lo vi en New Scientist, donde dedican una galería de siete imágenes a conceptos astronáuticos futuros con los que sueñan los ingenieros aeroespaciales.
Miguel A. Artime Menéndez (Avilés 1971). Estudió informática en la Universidad de Oviedo. En 2002 comienza a publicar traducciones en el germen de lo que luego sería Astroseti, web que con el tiempo se convertiría en la web astronómica más visitada en lengua hispana. En Astroseti coordina la sección del Instituto de Astrobiología de la NASA (NAI). En 2005 la agencia espacial estadounidense le invita (junto al creador de la web Emilio González) a San Francisco para la conferencia AbSciCon. Comienza su experiencia con los blogs abriendo una bitácora en Barrapunto en 2005. En noviembre de 2006 funda su blog Maikelnai’s Blog. En 2009 recibe en Sevilla el premio Bitácoras al mejor blog cultural. En junio de 2010 comienza a colaborar con Yahoo! abriendo el blog Cuadernos de Ciencia junto a Javier Peláez.