La prueba del arquero

Por aberron, el 5 marzo, 2011. Categoría(s): Astronomía

¿Quién no sabe distinguir en el cielo la Osa Mayor llamada popularmente en ciertos sitios el Carro? la constituyen, fundamentalmente, cuatro estrellas que forman un cuadrilátero irregular, la caja del carro y tres que se alargan de él que se pueden considerar la lanza. Hay que mirar a la de en medio de estas tres últimas. Pueden ocurrir dos cosas: que se vea una estrella o que se vean dos. En el primer caso, el lector no habría podido ser un buen guerrero indio ni tampoco un explorador de muchos ejércitos europeos antiguos. Esta prueba de distinguir Alcor de Mizar, que así se llaman las estrellas de este sistema binario, se la hacían a los reclutas para saber si tenían buena vista o no.

Manuel Lozano Leyva, «El cosmos en la palma de la mano»

En algunas culturas amerindias, poder distinguir estas dos estrellas era requisito para ser nombrado responsable de la guardia personal del jefe de la tribu. En los tiempos en que los ejércitos árabes dominaban una gran parte del mundo por entonces conocido, era importante una selección adecuada de sus arqueros, pues el código de honor de la batalla exigía ser cuidadoso con los caballos enemigos, y se hacía necesario afinar el tiro para acertar con el jinete, y no con el noble bruto. Una consideración hacia los animales que frecuentemente extrañamos más de mil años después. Los aspirantes eran sometidos a la prueba de poder distinguir entre Mizar y Alcor y es por eso que eran conocidas como el caballo y el jinete. La costumbre se extendió a los tiempos en que Carlos V creó el cuerpo de Arqueros de la cuchilla, precedente de los Guardias de Corps.

La anécdota es conocida por la mayoría de aficionados a la astronomía, pero quizá pueda incitar el interés de los no iniciados. Podéis encontrar mucha más información en la entrada La prueba del arquero, en Bitácora del Galileo, un blog donde he caído por casualidad y he pasado horas leyendo y aprendiendo. Muy recomendable.



Por aberron, publicado el 5 marzo, 2011
Categoría(s): Astronomía