Tiangong-1, el primer ‘Palacio celeste’ de China

Por Ciudad Futura, el 6 octubre, 2011. Categoría(s): Ingeniería
Tiangong-1

Hace poco más de un año, en agosto de 2010, medios oficiales como la agencia estatal Xinghua o Renmín Ribao (‘Diario del Pueblo’, órgano del CC del PC de China) anunciaban la puesta a punto en su fase final del primer programa de estaciones orbitales tripuladas de la superpotencia asiática, así como que la primera de éstas sería lanzada en el año 2011. Este anuncio coincidía más o menos en el tiempo con otra decisión anunciada por Estados Unidos, provocada indudablemente por la aguda crisis económica que sufre este país desde 2008: la agencia espacial pública NASA retiraría sus transbordadores espaciales en 2011 y suspende su nuevo proyecto de programa tripulado, dejando así de tener capacidad autónoma para enviar astronautas al espacio durante un período aún por determinar… Ambas previsiones se han cumplido en este año en el que conmemoramos medio siglo de presencia de nuestra especie en el espacio, la hazaña del vuelo de Yuri Gagarin. (Vostok 1, URSS, 1961).

El 29 de septiembre de 2011, hace unos días, China ha lanzado su primera estación espacial con capacidad para albergar cosmonautas: el Tiangong-1 (“Palacio celeste”). La primera estación Tiangong acompaña a partir de ese día en nuestra órbita a la Estación Espacial Internacional (ISS). El lanzamiento se efectuó con éxito a las 13:16 (UTC) por medio de un cohete Larga Marcha CZ-2F/G desde el Centro Espacial Jiuquan (uno de los tres cosmódromos de China), ubicado en la provincia de Gansu, en pleno desierto de Gobi al sur de la frontera con Mongolia. Todas la operaciones de este vuelo se han realizado de forma automática (no tripulada), al estilo de los módulos rusos de la ISS (que alcanzan la órbita sin tripulación y se acoplan a la ISS por medios propios). La órbita típica del Tiangong-1 estará situada a unos 350 km de altitud sobre la Tierra.

Arriba: El cohete Larga Marcha CZ-2F/G con la estación Tiangong-1 en su cofia a la salida del edificio de ensamblaje vertical del cosmódromo Jiuquan, listo para ser trasladado a la rampa de lanzamiento (foto inferior).

El lanzador de este primer “Palacio celeste” orbital forma parte de la familia de cohetes chinos Larga Marcha. El CZ-2F/G se compone de dos etapas con cuatro aceleradores en la primera de ellas. Esta variante del Larga Marcha es capaz de transportar a la órbita baja de la Tierra una carga útil de hasta 8.600 kg, protegida en el interior de su cofia aerodinámica.

Arriba: Recreación artística de una cita espacial en órbita (‘rendezvous’) entre una nave Shenzhou (izquierda) y una estación Tiangong de primera generación (derecha). Abajo: Nave Shenzhou (izquierda) y estación Tiangong-1 (derecha).

Estación Tiangong y nave Shenzhou

China y la Federación de Rusia comparten en la actualidad el exclusivo privilegio de disponer de tecnología operativa para enviar personas al espacio gracias a las naves Shenzhou y a sus progenitoras Soyuz [véase en Amazings.es la reciente infografía: Soyuz: La nave de la Tierra]. Tras años de programa espacial propio basado en el lanzamiento de satélites y sondas, el 15 de octubre de 2003 la República Popular China se convirtió en la tercera potencia espacial tripulada de la historia con el lanzamiento y puesta en órbita del cosmonauta chino (taikonauta) Yang Liwei a bordo de la nave Shenzhou-5. Las Shenzhou chinas son una versión actualizada de las míticas  Soyuz soviético-rusas, la otra nave actual con capacidad de enviar cosmonautas a nuestra órbita. Diferencias técnicas aparte, ambas comparten el diseño básico de la Soyuz original soviética de 1967, aunque las Shenzhou chinas tienen unas cotas ligeramente superiores, mayor espacio disponible para los cosmonautas y un módulo orbital cilíndrico sobredimensionado. Una Shenzhou fue la primera nave que envió un chino al espacio y será también una Shenzhou la primera nave china que se acople a una estación espacial en órbita.

Izquierda: Yang Liwei, primer cosmonauta chino • Derecha: Zhou Jianping, ingeniero jefe de la Oficina de Ingeniería Espacial Tripulada de China (CMSE)

Características de la estación orbital Tiangong-1

El primer programa de estaciones orbitales chinas tiene como objetivos principales establecer una presencia prolongada en el espacio, poner a prueba la eficiencia de los sistemas de cita y acoplamiento en órbita y desarrollar un programa de investigación espacial por medio de laboratorios científicos permanentes. En este sentido, el Tiangong-1 es básicamente un minilaboratorio orbital autopropulsado de 3,5 m de diámetro máximo, 10,4 m de longitud (incluyendo el puerto de atraque) y una masa de 8,5 toneladas.

Por lo que se puede deducir de las ilustraciones mostradas por la Oficina de Ingeniería Espacial Tripulada de China, el diseño básico del Tiangong permitirá en un futuro próximo variantes polivalentes; como su reconversión en carguero espacial automático de segunda generación (tipo ATV de la Agencia Espacial Europea) para el reabastecimiento de una futura estación espacial multimodular china prevista en la década de los próximos años 20, tal y como veremos al final del presente trabajo.

Disposición de los bastidores (‘racks’) de equipos de experimentación, técnicos, informáticos y de comunicaciones del módulo o segmento laboratorio del Tiangong-1, ubicados en la zona presurizada habitable.
Vista posterior del Tiangong-1. En primer plano, el segmento o Módulo de servicio (aviónica, comunicaciones, equipos de soporte vital, motores principales de propulsión, etc.)

Aunque aún no ha sido visitado ni habitado tras su reciente puesta en órbita, el Tiangong-1 es ya una estación espacial que dispone de puerto de atraque para naves tripuladas (las Shenzhou referidas anteriormente) y, por tanto, tiene capacidad para albergar a cosmonautas en su interior en períodos prolongados. Sólo una pareja en este caso dadas sus limitadas dimensiones y capacidades.

Si bien el Tiangong-1 tiene algunas similitudes con la primera estación espacial de la historia, la Salyut 1 (URSS, 1971) [véase en Amazings.es: Salyut 1: La primera estación espacial de la historia], hay diferencias sustanciales entre ambas. La estación orbital china no llega ni a la mitad de la masa de la soviética de los años 70: 8.500 kg frente a 18.425 kg respectivamente… y mucho menos en cuanto al volumen habitable: 15 m3 del Tiangong-1 frente a los 90 m3 de la Salyut 1. En cualquier caso, la estación Tiangong tiene al igual que la primera Salyut un solo puerto de atraque de naves en el frontal de su segmento habitable, el Módulo laboratorio, así como un segmento de servicio donde se ubican la instrumentación, sistemas de soporte vital y de energía (con paneles solares fotovoltaicos desplegables) y los motores principales de propulsión (varios motores de control de actitud o maniobra están ubicados diferentes zonas del fuselaje externo).

El Puerto de atraque de naves del primer Tiangong está basado en el sistema APAS-89 de diseño soviético, utilizado entre 1994 y 1998 en la Estación Mir para el atraque de transbordadores de la NASA (Programa Shuttle-Mir) y elegido por los chinos para sus estaciones y naves futuras. Se trata de un sistema de acoplamiento nave-estación andrógino, diferente del sistema, valga la expresión, “macho-hembra” (también de diseño soviético) con el que se acoplan a la ISS las naves Soyuz o los cargueros Progress (Rusia) y ATV (Europa).

Prueba en tierra del sistema de acoplamiento andrógino tipo APAS-89 del que está dotada la estación Tiangong para el acoplamiento de naves Shenzhou
Izquierda: fase final para el acoplamiento entre una estación Tiangong (izquierda) y una nave Shenzhou (derecha) • Derecha: Encuentro en órbita de tripulantes tras finalizar la maniobra de atraque.

A pesar de que China es hoy por hoy la única potencia con suficiente capacidad económica para disponer de un programa tripulado independiente de la cooperación internacional —como así viene demostrando en los últimos años—, el estado actual de desarrollo de éste aún dista mucho de poder emular los espectaculares resultados de las estaciones espaciales de la Unión Soviética de las décadas de 1970 y 1980 e incluso el actual programa espacial tripulado de la Federación de Rusia, el que asegura en nuestros días la presencia internacional de cosmonautas y astronautas en la ISS y el mantenimiento y supervivencia del complejo espacial internacional.

El camino del cosmos está abierto para China

China anuncia a partir del lanzamiento de su primera estación espacial propia —éste que nos ocupa— un ambicioso programa orbital tripulado. A corto plazo están previstos varios vuelos de naves Shenzhou a la nueva estación Tiangong-1; el primero de ellos sin tripulación para poner a prueba los sistemas de cita espacial y acoplamiento automático: Shenzhou 8 en noviembre de 2011; para posteriormente realizar al menos dos vuelos tripulados con destino al Tiangong-1:  Shenzhou 9 y Shenzhou 10 a partir de 2012.

Entre 2014 y 2020 están programados nuevos lanzamientos de estaciones unimodulares Tiangong de características similares a la primera (Tiangong 2 y Tiangong 3) y posteriormente un Módulo de 20 toneladas similar a las Salyut, al Módulo base de la Estación Orbital soviética Mir o al módulo ruso Zvezda de la ISS, que estará dotado de múltiples puertos (cinco frontales y uno posterior) que sirvan para el atraque de naves tripuladas o cargueros automáticos y para su posterior ampliación con el acoplamiento sucesivo de nuevos módulos hasta llegar a las 60 toneladas o más en órbita.

En resumen, China podría estar en condiciones a principios de la próxima década de componer el mecano de una Estación espacial multimodular tripulada de forma permanente. La República Popular China, la “potencia económica global del siglo XXI”, la fábrica del mundo actual, está dando aún sus primeros pasos en el espacio tripulado sin prisas pero sin pausas, con la firmeza y seguridad que caracterizan a quien sí tiene recursos propios para seguir adelante en el camino del cosmos.

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Referencias de datos y enlaces relacionados
Lanzamiento del Tiangong-1 / Larga Marcha CZ-2F/G (en ‘Eureka’)
China pone a punto su propio programa de estaciones orbitales al tiempo que EEUU abandona la carrera espacial tripulada (en ‘Ciudad futura’)
Salyut 1: La primera estación espacial de la historia. Historia e Infografía (de ‘Ciudad futura’ para ‘Amazings’)

Fuentes principales
Xinghua (Agencia oficial de noticias de China)
CCTV (TV pública de China)
China Daily
Diario del Pueblo (órgano del Comité Central del PC de China)
Oficina de Ingeniería Espacial Tripulada de China (CMSE)

Vídeo: Lanzamiento de la estación espacial Tiangong-1 desde el cosmódromo de Jiuquan con planos generales y cámaras subjetivas en el cohete Larga Marcha (CCTV News / YouTube):

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=_sNGhhE4YwI[/youtube]