Artículo originariamente publicado el domingo 19 de marzo de 2017 en el Suplemento «El Zoco» de Diario Córdoba.
El pasado 17 de febrero la Unión Astronómica Internacional (IAU por sus siglas en inglés) dio a conocer los nombres oficiales de 17 asteroides del Sistema Solar que hasta entonces sólo tenían una designación genérica. El “bautizo” de estos objetos fue apadrinado por las 17 instituciones que resultaron ganadoras del concurso internacional “NameExoWorlds”. Realizado en 2015, esta iniciativa buscaba involucrar a ciudadanos de todo el mundo para que votaran los nombres propios de 17 estrellas y 34 exoplanetas que los orbitan. La gran ganadora de dicho concurso fue la propuesta de la “Estrella Cervantes”, impulsada por el Planetario de Pamplona y la Sociedad Española de Astronomía, con la colaboración del Instituto Cervantes. Ahora la estrella “mu Arae” se conoce de forma oficial como “Cervantes”, y los cuatro planetas que la orbitan se llaman Dulcinea, Rocinante, Quijote y Sancho. También desde España la asociación de astrónomos aficionados de la Universidad Complutense de Madrid “Hypatia” consiguieron dar nombre al exoplaneta iota Draconis b, bautizándolo en honor de la famosa científica alejandrina (Hipatia).
Así, de los 17 nuevos nombres otorgados por la IAU a asteroides, dos han sido españoles. El asteroide (6118) 1991 JH1 fue bautizado en honor al poeta y dramaturgo “Miguel Hernández” por la asociación Hypatia, mientras que el asteroide (6192) 1990 KB1 se llama ahora “Javier Gorosabel” a petición del Planetario de Pamplona. Se rinde así homenaje póstumo al brillante astrofísico eibarrés Javier Gorosabel (1969-2015), referente mundial en la investigación de los llamados “estallidos de rayos gamma”, unos fenómenos cósmicos de gran violencia de los que él era especialista, y cuyo estudio compaginaba con una intensa labor divulgadora y de promoción de la Astronomía.
El criterio de la IAU para dar estos nombres es que sean una sola palabra, por lo que los asteroides se llaman (6118) Miguelhernández y (6192) Javiergorosabel. El número entre paréntesis indica el orden en el que el asteroide fue clasificado. Miguel Hernández y Javier Gorosabel se unen a una relativamente larga lista de personajes españoles que dan nombre a asteroides, como los históricos (2608) Séneca, (7445) Trajano, (7446) Adriano, (8318) Averroes, (256796) Almanzor, los artistas (9829) Murillo, (79144) Cervantes, (155438) Velázquez, (6592) Goya, (4221) Picasso, (2919) Dalí, los científicos (9629) Servet, (117413) Ramón y Cajal, (117435) Severo Ochoa, los astrónomos (1655) Comás Solá, (120141) Lucas Lara, (202812) Carlos Sánchez, (161545) Rafael Ferrando, (44216) José María Oliver Cabasa, el tenista (128036) Rafael Nadal y astronauta (24048) Pedro Duque.
No a todo el mundo le pareció acertada la decisión de las nuevas designaciones. A los pocos días del anuncio de la IAU se publicó un polémico artículo donde un periodista anglosajón de noticias científicas calificaba de “basura” muchos de estos nombres inspirados en personajes de lenguas no inglesas. Por supuesto el autor recibió duras críticas, aunque tristemente su artículo sigue encabezando la lista de Google al buscar “(6118) Miguelhernández”. En cualquier caso los nombres de los asteroides es un ejemplo más de cómo la Ciencia hace honor a la Cultura de la Humanidad al promover personajes ilustres de múltiples disciplinas humanísticas de las culturas de la Tierra.
Ángel López-Sánchez es astrónomo y comunicador científico en la Escuela de Ciencias Matemáticas y Físicas de la Universidad de Macquarie (MQ) con sede en Sydney, Australia. Es un reconocido experto en el estudio de cómo el gas se convierte en estrellas en galaxias cercanas y cómo esto afecta la evolución de las galaxias, particularmente el enriquecimiento químico. Dirige el programa «HI KOALA IFS Dwarf galaxy Survey» (Hi-KIDS), que utiliza el instrumento KOALA en el Telescopio Anglo-Australiano (AAT) de 3,9 m para diseccionar 100 galaxias enanas cercanas ricas en gas para comprender su historia y evolución. También brinda apoyo a los astrónomos visitantes del AAT. Es un miembro activo en grandes estudios de galaxias espectroscópicas y los próximos estudios de galaxias ópticas y de radio.
Tras recibir la licenciatura en Física Teórica en Granada en 2000 completó su Tesis Doctoral en Astrofísica en el prestigioso Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC, España) en diciembre de 2006. Se trasladó a Australia en 2007, cuando se incorporó al CSIRO «Astronomy and Space Science» para trabajar en el «Local Volumen HI Survey ”(LVHIS), que realizó observaciones radio-interferométricas de galaxias ricas en gas en el Australian Telescope Compact Array. En 2011 se unió al Australian Astronomical Observatory (AAO) y a la Universidad de Macquarie combinando soporte de instrumentación telescópica, investigación, conferencias y divulgación. En mayo de 2023 fue incorporado como investigador académico a tiempo completo en la Escuela de Ciencias Matemáticas y Físicas de la Universidad de Macquarie.
Es el actual presidente de la asociación de Investigadores Españoles en Australia-Pacífico (SRAP, Spanish Researchers in Australia-Pacific), entidad de la que es miembro fundador, y participa activamente en RAICEX (Red de Asociaciones de Investigadores Españoles en el Extranjero) dentro de la comisión de comunicación y en diplomacia científica. Es el vicepresidente de la Agrupación Astronómica de Córdoba (AAC), representante de la Red Andaluza de Astronomía (RAdA) y miembro de la Unión Astronómica Internacional (IAU), la Sociedad Española de Astronomía (SEA) y la Australian Astronomical Society (ASA).
Es miembro de la comisión ProAm (relaciones entre astrofísicos profesionales y astrónomos aficionados) de la SEA, de la que fue coordinador entre 2016 y 2020, y participa activamente en poner en contacto el mundo de la astrofísica profesional y de la astronomía aficionado. Es un apasionado astrónomo aficionado que utiliza su propio equipo para capturar la belleza del Cosmos.
Fue el primer astrofísico español en tener un blog de divulgación astronómica («El Lobo Rayado», en 2003) y es miembro fundador de la red Naukas, donde tiene el blog «Universo Rayado» desde 2015.