Ley de Conservación de la Dificultad:
no hay forma fácil de probar una idea profunda.
Un químico, un ingeniero y un matemático iban caminando por la calle y se encontraron una caja llena de latas de cerveza. Sin embargo, estas latas eran como las de comida enlatada: no tenían anillas para abrirse, y ellos no tenían consigo ninguna herramienta.
El químico se fue corriendo a su laboratorio y rápidamente preparó una solución que disolvería el metal y al instante se evaporaría, dejando intacta la cerveza.
El ingeniero fue a su taller y en un santiamén creó el Hyper-Abrelatas, capaz de abrir hasta 25 latas por segundo, sin derramar una gota de líquido y con un módulo de reciclado opcional.
Cuando regresaron, encontraron al matemático bien borracho, acabándose la última cerveza.
— ¿Pero cómo diablos has hecho eso sin herramientas?
— Pues empecé asumiendo que las latas ya estaban abiertas, y procedí a partir de ahí…
* * *
En un seminario de profesiones mixtas, el profe les dice que van a tener que aprenderse de memoria la guía telefónica.
Los matemáticos se escandalizan, “¿De memoria, está loco?”
Los de física preguntan, “¿Por qué?”
Los de ingeniería suspiran y dicen, “Oh, ¿de verdad es obligatorio?”
Los de química, “¿Para el siguiente lunes?”
Los de contabilidad (tomando nota), “¿Para mañana?”
Los de leyes muy ufanos, “Ya nos lo sabemos.”
Los de medicina, “¿Podemos empezar con las páginas amarillas?”
Incómoda verdad matemática:
los símbolos algebraicos se usan cuando no sabes de qué estás hablando.
Nací en México y vivo en China desde el 2000, donde estudié idioma e historia, y luego fui investigador visitante en el Centro Internacional Wan Lin Jiang de Economía y Finanzas, así como profesor de economía e historia para extranjeros en la Universidad de Zhejiang. Actualmente dirijo el Mexico-China Center y doy conferencias acerca de ciencia y cooperación tecnológica internacional.